Mami y papi relajados

En Bio Baby sabemos que la llegada de un bebé es algo maravilloso pero a la vez un poco estresante ya que es una responsabilidad nueva y demandante.

Es por esto que tenemos una lista de actividades que papá y mamá pueden hacer en pareja para relajarse y disfrutar más y mejor a sus peques.

1. Salgan a pasear: Pueden organizar algo divertido para compartir en familia. Un fin de semana de sacar la carriola y disfrutar de todo lo bonito que hay en su ciudad.

2. Planeen rutinas especiales: Es importante que como pareja tengan un momento para compartir solo los dos. Puede ser una cena cada dos semanas o una cita al cine, lo bonito es que disfruten de la compañía del otro.

3. Tengan citas espontáneas: Llamar a su pareja a la hora de la comida e invitarlos a su lugar favorito puede ser un gran plan para alejarse un poco del caos de casa y disfrutar de una deliciosa comida.

4. Creen rituales en familia: Puede ser salir todos juntos a desayunar los domingos o ir al cine por la tarde, lo importante es crear un vínculo especial entre todos.

5. Planeen una cita en casa: No tienen que salir a un lugar bonito para platicar y saber cómo estuvo el día del otro. Pueden poner al bebé o a los peques a dormir, pedir comida y cenar tranquilamente mientras están en casa.

Lo importante de una pareja es mantener la comunicación, no tienen que estar encima del otro todo el tiempo, sólo ser consientes de que los dos están pasando por muchos cambios y emociones, que aunque les guste estar juntos, también necesitan un momento para ustedes.

Una familia necesita cimientos fuertes y esos los construyen papá y mamá.

El cuidado de la mollera del bebé

Se llaman fontanelas a la separaciones de los huesos de la cabecita del bebé, esto da movilidad y facilita que descienda a través del canal vaginal durante el parto. Los huesos craneales permanecerán separados para permitir el crecimiento del cerebro. Poco a poco se fusionan y durante ese tiempo el pediatra medirá mes con mes la cabeza del bebé para comprobar que se desarrolla de forma conveniente.

Comúnmente se denomina mollera a la separación entre el hueso frontal del cráneo y los parietales; la zona se localiza en la parte superior de la cabecita del bebé y es suave al tacto, incluso, puede percibirse a simple vista. Este espacio cierra antes de los dos años de edad.

El espacio de la parte posterior del cráneo se fusiona entre el primer y el tercer mes después del nacimiento. Los correspondientes a la sienes hacia los seis meses y las de atrás de las orejas a los 18 meses de edad.

La membrana que recubre las fontanelas es lo suficientemente fuerte para resguardar y también con la flexibilidad necesaria para permitir el crecimiento normal del cerebro. El cuidado consiste en proteger la cabeza del bebé de la misma manera que se debe cuidar el resto del cuerpo.

Evitar movimientos bruscos, cuidar que no se golpee con algún mueble al cargarlo o moverlo, acostarlo siempre en lugares seguros para evitar caídas, no permitir que otros niños lo tomen en brazos o quieran jugar con el bebé como si fuera un muñeco, son algunas de las precauciones básicas.

Si el bebé llega a deshidratarse se nota un hundimiento en la mollera. Los remedios caseros o tradicionales pueden ser peligrosos, lo recomendable es recurrir al médico ante cualquier anormalidad. Tampoco se debe dar masaje, aplicar pomadas o cataplasmas. Las fontanelas cerrarán a su debido tiempo de manera natural.

Cuando no se nota la pancita

Muchas mamis se preguntan si es normal que están embarazadas pero su bebé aún se nota en la pancita. La realidad es que lo más seguro es que sea completamente normal, cada embarazo es diferente y no existe un momento específico en el que su bebé tenga que asomarse.

A las mujeres que van a ser mamis por primera vez usualmente se les empieza a notar más tarde, ya que sus músculos aún no han experimentando los cambios por los que pasa el cuerpo en este proceso.

Hay que tomar en cuenta que las mujeres que son más altas o con  un torso más largo suelen tener una pancita más chiquita porque tienen más espacio vertical para acomodar a su bebé.

De cualquier forma su doctor tomará varias medidas para asegurarse de que el desarrollo de su bebé es el adecuado. Por ejemplo, en su primer trimestre se les hará un examen pélvico para determinar el tamaño de su útero en crecimiento y a su vez solicitará un ultrasonido para ver el tamaño del bebé.

Generalmente cuando una mami llega a la semana 20 es cuando se empieza a monitorear la altura del fondo de su útero, es decir, la distancia que encontramos del hueso púbico hasta la parte superior del útero, esto para determinar el tamaño, el índice de crecimiento y la posición del bebé.

Las mamis primerizas empiezan a verse embarazadas alrededor de la semana 12 y hasta la semana 16, mientras que las mamás que ya están en su segundo embarazo o posteriores empiezan a enseñar su pancita entre la semana 6 y 18.

Existen casos de mamis que tenían sobrepeso antes de quedar embarazadas que tardan más en verse embarazadas.

Hay ocasiones en que se pueden sentir desesperadas de saber que están embarazadas, tener todos los síntomas y simplemente su cuerpo no lo hace ver por lo que la ropa de maternidad aún no les queda del todo bien.

El consejo que tenemos en Bio Baby para ustedes es: ser pacientes. Es muy importante disfrutar de este momento tan especial, observar como cambia su cuerpo y su forma de ver la vida.

Recuerden que si ustedes están tranquilas y contentas, su bebé también lo estará.